Hace unos días, en The Guardian analizaban el “modelo contador” para el acceso a los medios online. Durante mucho tiempo, la publicidad ha sido la principal fuente de ingresos de los medios digitales. Pero, según se ha analizado en profundidad el tipo de lector que visita estos medios, se sabe que un gran porcentaje se trata de lectores de paso, no habituales.
Estos visitantes accidentales no son fieles a la marca ni se entretienen en mirar la publicidad, por lo general específica para el tipo de lector de determinado medio. Esto ha traído un descenso del precio de los anuncios, y con ello, el descenso de ingresos.
Frente a esto, existen dos modelos: el estrictamente de pago (como el Times de Londres) y el que da contenido gratuito junto a otro tipo de información más valiosa o exclusiva, ésta de pago (Wall Street Journal, con ya un millón de suscriptores, pero ha tardado 10 años en conseguirlos). El primero es arriesgado por la posibilidad de perder de entrada un 90% de los lectores, aunque sean accidentales. El segundo tiene el riesgo de que muchos lectores se conforman sólo con los contenidos gratuitos, por lo que se pierden igualmente ingresos.
De modo que la opción contador resulta ser una tercera vía válida frente a modelos gratuitos que se apoyan en una publicidad que, como vemos, tiende a huir de las plataformas digitales. El método consiste en que una vez que el visto lector ha leído un cierto número de artículos en un periodo determinado de tiempo (o capítulos o libros si se aplica al acceso a los ebooks), el lector necesita tienen que convertirse en suscriptor de pago poder seguir leyendo. Este es el modelo del Financial Times: después de 10 artículos en abierto, se le pide al lector que pague entre € 4.99 y € 7.49, dependiendo del paquete.
Hasta el momento, según el artículo del Guardian, el FT.com cuenta con 3,4 millones de usuarios registrados, de los cuales 224.000 se han convertido usuarios de pago (cerca del 8%). La cuestión de principal de este modelo es decidir cuántos contenidos en abierto permitir antes de pasar a cobrar, y cuánto cobrar a partir de entonces.
En todo caso, la cuestión es encontrar la medida de cada usuario. Es decir, que cada lector pueda encontrar el modelo particular que más le convenga de manera individual.
fuente: blog de dosdoce